Y recuerdo todas esas cosas locas que dijiste.

La pregunta de si me echas de menos me ronda la cabeza tanto que no me deja en paz. Y realmente me gustaría que lo hiciera porque a estas alturas, ya no lo merezco. Siempre he querido saber que pasaría el día en el que me echaras de menos. El sentimiento exacto que recorrería tus terminaciones nerviosas. Es una de esas dudas que jamas sabré quitarme. Supongo y asumo que tuvimos poco tiempo y empecé a creer que era mejor arder que dejarnos con las ganas, pero ya no estoy segura. Si no me hubiera lanzado al abismo no me habría reventado contra el fondo. Y que eso es lo peor, que no importa lo buena que fuera la sensación de estar volando, porque me he empeñado en no volver a sentirla. No se si fuiste un punto negativo o positivo en mi historia. No se si la marcaste, o la jodiste. O si fuiste el principio de mi vida, o el principio del final. No tengo muy claro donde encaja nuestro " nosotros" en el esquema de las cosas en el universo. Y necesitaba escribir todo esto porque hay momentos en los que ya no te pienso, y otros en los que no quiero no pensarte. Pero, a veces me lo guardo todo tanto que, de alguna manera tiene que salir. Reventando esquemas, claro, porque así soy yo. Una puta loca incapaz de controlar lo que siente, que va por ahí, dándose de ostias, como si nada importara. Pero lo hacen. Hay cosas que importan, y ojala pudiera pedir que no lo hicieran, porque lo que importa te jode, y lo que te jode te marca. Pero esas cosas son la parte mas humana de mi. Aun que ojala ya no sintiera, que he cubierto el cumulo de decepciones, creo yo, pero eso a la vida se la suda, porque me sigue clavando agujas en los ojos mientras me chilla que no llore. Que contradicción, como ha sido el resto de mi vida. Pero ahora sé que no tiene que ver contigo, que yo sola me jodí. Pero que gracias, porque nunca volviste. Y es un alivio no tener que hablar de ti, y de nuestros errores que cicatrizaron sobre mi piel, como todo lo demás, y tengo la suerte de que la marca que tu dejaste, no se ve. 

Dicen que soy una rompecorazones.

No saben que tu me rompiste el corazón.